El cuadro pertenece a la época de mayor floración de la creatividad Koro. Motivo cotidiano – un carro en un campo en un camino mojado después de una lluvia – fue percibido por el artista como una imagen poética. Todo reluce y brilla en este modesto rincón de la naturaleza: tierra y aire húmedos, nubes que se mueven rápidamente, árboles que revolotean al viento.
Un frotis dinámico y ligero con la mayor precisión transmite esta vida cambiante de la naturaleza. Pintar Corot, es principalmente el arte de los valeros, matices y matices del mismo color. El artista evita los tonos brillantes y nítidos, prefiriendo los tonos gris plateado o marrón dorado, logrando un refinamiento particular de la escala de colores. En el Museo Estatal de Bellas Artes.
A. S. Pushkin ingresó en 1924 desde el Museo Rumyantsev.