La gran fama Ivan Argunov, el artista siervo trajo sus impresionantes retratos. Durante su larga vida, Argunov escribió una gran cantidad de retratos, escribió personas comunes y monarcas.
Argunov buscó maximizar la confiabilidad del retrato, sin adornos. Por lo tanto, sus retratos se distinguen por el naturalismo y el encanto.
Este autorretrato del artista también se distingue por la vivacidad y el lirismo. Argunov en un autorretrato se representa en un traje de casa en el escritorio. Una brújula y lápices son arrojados descuidadamente sobre la mesa, el artista sostiene un pincel en su mano.
Crea la sensación de que se separó del trabajo por solo un minuto.
El artista viste un traje marrón dorado, con una peluca en la cabeza, que en ese momento se usaba no solo en los casos oficiales, sino también en la vida cotidiana. El artista representado en el retrato mira directamente al espectador, sus ojos son cálidos y amigables.
Con maestría, los pliegues y los detalles de la ropa se trazan con amor. Características suaves, tonos cálidos elegidos por el artista, muestran al autor en un ambiente hogareño y acogedor.
Argunov en un autorretrato no representó ningún detalle adicional que pudiera distraer al espectador de la imagen de una persona. Con un fondo monocromático contrasta el punto brillante de la bufanda del artista.