En la historia del arte se conocen maestros, cuyo trabajo combina los logros de los predecesores y contemporáneos. Al mismo tiempo, es armonioso, capaz de causar admiración, pero en él no hay nada que sorprenda y sorprenda: soluciones artísticas inesperadas.
Entre estos artistas se encuentra el eminente pintor holandés Hans Memling. Estudió pintura en su tierra natal y en Alemania, entre sus profesores llamados Lochner y Rogier van der Weyden, a cuya muerte Memling permaneció en Bruselas, y desde 1466 se trasladó a Brujas, donde en 1468 fue reconocido como el pintor más autorizado de la ciudad. El artista escribió el altar de tres hojas, “El juicio final”, por orden de uno de los representantes de la banca Medici en Brujas.
La composición de la parte central se basa en la composición de una imagen de altar similar, escrita por Rogier van der Weyden unas décadas antes. Sin embargo, la plasticidad de las figuras en Memling es más libre, y la interpretación de la trama en su conjunto es menos dramática. Esta es una de las obras más famosas del artista, creada en el período inicial de su obra.
Otras obras famosas: “Tríptico Donna”. Ok 1477-1480. Museo Nacional, Londres; “Siete placeres de María”. 1480. Antiguo Pinakothek, Munich; “Cáncer de Santa Úrsula”.
1489. Museo Memling, Brujas.