Tejedores para el enorme telar que Van Gogh pintó más de una vez. Le impresionó el impresionante tamaño de este mecanismo, que consistía en fuertes vigas y palos de madera. La máquina oscurecida y manchada era un símbolo del trabajo humano pesado, que Van Gogh en letras llamó verdaderamente infernal.
En los trabajos de esta serie, el tejedor con la máquina se representa en diferentes ángulos. En esta imagen, Van Gogh describe la escena, estando en el lado izquierdo del trabajador, y desplazando el centro de la composición hacia el borde derecho del lienzo. El mecanismo de tejido se dibuja con gran precisión.
El artista, fascinado por la complejidad de un dispositivo intrincado, se propuso mostrarlo de la manera más confiable, prestando atención a cada detalle. El hombre, por el contrario, está representado de una manera bastante arbitraria, su figura salió pesada y torpe, las proporciones fueron muy violadas. Aparentemente, esto se debió a la incapacidad, que al principio del camino creativo era un obstáculo bastante fuerte para el artista.
Uno de los objetivos que Van Gogh se propuso fue escribir expresamente una máquina de madera contra una pared gris. Debido a las sombras en profundidad y la iluminación hábilmente seleccionada, logró retratar el automóvil volumétrico, expresivo y casi monumental.
El esquema de color monocromo consiste en tonos de gris y marrón. Pero algunos puntos brillantes, en primer lugar un color rojo espeso, privan la coloración de la monotonía, creando un acento expresivo.