“La biografía de San Antonio”, escrita por Atanasio el Grande, narra eso en 271 dC e. Todavía el joven Anthony se retiró al desierto para vivir un asceta. Vivió durante 105 años. La “Leyenda Dorada” de Yakov Varaginsky, muy común en la Edad Media, contó de manera muy colorida las dos variantes de la tentación del santo: en el suelo y en el agua.
En 1478 se lanzó la edición holandesa de la Leyenda dorada, que influyó en la imagen de este tema de los artistas del norte de Europa.
En el tablero de Madrid, Bosch retrató la tentación “terrenal” de San Antonio, cuando el diablo, distrayéndolo de la meditación, tentado con bendiciones terrenales. Al final de su carrera, Bosch crea varias versiones de The Temptation of St. Anthony.
En el Louvre se almacenan varios dibujos preparatorios para composiciones conocidas y desconocidas. Anthony para las fuerzas del mal está fuera de alcance. Su espalda redonda, su postura, sus dedos cerrados entrelazados “en la cerradura”, hablan sobre el grado extremo de inmersión en la meditación.
Una persona que no tiene idea del misticismo cristiano medieval, la austeridad, el rechazo de los bienes mundanos y el mundo como tal, y debe sentir el estado de ánimo del santo. Incluso el diablo en forma de cerdo se congeló tranquilamente al lado de Anthony, como un perro domesticado. Entonces, ¿ve o no ve al santo en la imagen de los monstruos de Bosch que lo rodean? Si crees en Ruysbruk, entonces no: son visibles solo para nosotros, pecadores, porque “lo que contemplamos es lo que somos”.
Al igual que en las tablas que representan a San Jerónimo, la maldad que rodea a San Antonio no parece terrible: los demonios se reducen a juguetes y nadie no solo ataca al ermitaño, sino que no le presta atención, excepto el monstruo que hace caras en el agua.
La imagen de “San Antonio” o la de “Los científicos de La Tentación de San Antonio” se compara con el famoso grabado de Durero “Melancolía I”. Es de destacar que la palabra “melancolía” se entendió entonces como una tendencia no solo a la tristeza, sino también a la reflexión. Pero una parte integral del pensamiento son las dudas, incluidas las dudas sobre las verdades duraderas, y esto es defectuoso. La imagen de Bosch del conflicto interno de un hombre que reflexiona sobre la naturaleza del mal, sobre lo mejor y lo peor, sobre lo deseado y lo prohibido, dio como resultado una imagen muy precisa del vicio.
Anthony, por su poder, que recibe por la gracia de Dios, resiste el aluvión de visiones viciosas, pero ¿puede un mortal común y corriente resistir todo esto?