“Retrato de Madame Edma Pontion”, escribió Bertha Morisot en 1871.Edma Pontion se representa en un retrato en una “posición interesante”.
Cabe señalar que escribir o fotografiar a mujeres embarazadas en ese momento era considerado indecente, y solo unos pocos pintores se atrevieron a romper esta “línea de decencia”.
Pero Morisot no solo la rompe. Ella nos muestra la pose cansada de la modelo, su tez amarillenta-pálida, extraña – mirando al espectador y al mismo tiempo sin ver – mira. La franqueza de este retrato es la franqueza de las pinturas de Manet.
Pero su severidad y la moderación femenina son características del casto estilo Morisot.