Los retratos son solo una parte insignificante de la enorme herencia artística de Tiepolo, pero las obras que nos llegan demuestran la capacidad del artista para transmitir no solo la imagen del retrato, sino también el carácter del modelo.
Además de los retratos, Tepolo dejó algunos cuadros, que el propio artista llamó bocetos característicos. Estos incluyen retratos masculinos de orientales, como, por ejemplo, “El jefe de un hombre oriental con bigote y turbante grande”, o bocetos instantáneos como el trabajo “Pulcinelli sentado en el suelo”.
Pulcinelli es un personaje de la comedia italiana del arte, un pariente cercano de nuestro Petrushka. Finalmente, Tiepolo posee varios retratos femeninos hermosos, pintados por el artista con sus hijas. Entre estas obras se encuentra un retrato misterioso, que se llama “Mujer joven con una gorra triangular”, aprox.
1760.