¿Quién es esta mujer voluptuosa, vestida con ropa translúcida, más adecuada para un harem, en una foto, y una mujer que expone descaradamente su belleza al mundo entero, a otra? ¿Es la misma mujer? Apasionada, desafiante, seductora, descarada, porque sus ojos están fijos sin una sombra de vergüenza directamente en el espectador. Sin embargo, ¿qué pasa con su nombre? La mayoría responderá: en dos cuadros, la duquesa de Alba, ya que ni una sola leyenda del arte ha puesto raíces tan profundas en la imaginación del público como la sugerencia romántica de que durante su apasionado romance con la duquesa, Goya la perpetuó en estos dos lienzos.
Una hipótesis más convincente es que el amante de Manuel Godoy, el primer ministro y amante de la reina Marie-Louise, podría servir de modelo para las pinturas.
Ambas pinturas se incluyeron en el inventario de la propiedad de Godoy cuando salió de España en 1808. Pero esto es solo una evidencia indirecta, y no sacudió la confianza general de que el modelo de la artista era la duquesa Alba. Al final, relativamente recientemente, en 1945, la familia Alba, queriendo convencer a todos de que la duquesa no tiene ninguna relación con estas pinturas, aceptó la exhumación de su cuerpo para comparar el tamaño del esqueleto con los de la imagen.
Los resultados de las mediciones no produjeron nada, pero un hecho extraño salió a la luz: las dos piernas de la duquesa estaban rotas; esto pudo haber ocurrido cuando su ataúd fue arrojado de la tumba familiar durante la guerra con los franceses. Pero quien posa para estas fotos, Mach se ha convertido en una de las mujeres más increíbles del mundo.
El maha desnudo de Goya es una de las mujeres más seductoras y atractivas que haya creado la imaginación del artista. Es sorprendente y el hecho de que Goya haya tenido el coraje de escribir esta imagen, ya que las figuras desnudas son extremadamente raras en el arte español. Uno de los “desnudos” más raros y bellos de toda la pintura occidental es el “Venus” de Velásquez.
Pero el “Maha” de Goya no es una diosa, ni es un estudio tranquilo y realista de la anatomía del cuerpo humano; Sin duda, esta es una mujer vivaz, bastante real, pero seductamente romántica.
No toda la sociedad española calificó a Naked Swing; Cuando la trama se hizo famosa, el artista fue convocado a la Inquisición. No se sabe si se llevó a cabo el juicio de Goya, pero sus pinturas no se quemaron y él mismo no fue encarcelado. Quizás uno de sus clientes de alto rango lo defendió.
Y Goya, quien no se negó a sí mismo el placer de escandalizar a la sociedad de vez en cuando, pero siempre evitó su abrazo fatal, no reveló quién posó para él para esta foto. Pero, hasta la muerte de la duquesa Alba, estas dos obras estaban en su tocador, y después de su muerte fueron a Manuel Godoy. A partir de 1814 fueron almacenados en la Academia de San Fernando, desde donde pronto fueron trasladados al Prado.