Esta primera imagen del artista fue creada en el estilo del “futurismo” bajo la fuerte influencia de la pintura francesa. Las “formas concéntricas” ya han aparecido en la imagen, que penetran en el espacio real, lo que indica la influencia de Orphism R. Delaunay, así como las ideas de la teosofía. La ciudad es uno de los motivos favoritos de los futuristas.
Además, el método del collage y su efecto se pueden sentir en el lado decorativo de esta imagen. El artista prestó especial atención a la combinación de color y movimiento.
Los colores blanco, azul, rojo que prevalecen en la imagen nos recuerdan la estrecha relación de A. Exter con Francia y París, en la que pasó muchos años de su vida y finalmente emigró de Rusia.
El sentimiento colorista y el pensamiento constructivo no son las únicas ventajas indicativas del lienzo. El artista ya se distingue por un uso significativo y basado en principios de las técnicas creativas. Formas dinámicas, características del futurismo, combinadas con un rico efecto luminoso.
También en la imagen se destaca la estructura interna de la composición, su ritmo claramente definido e intenso es notable.