
Con una técnica impecable, Lepeshinskaya pudo, en cada imagen creada en el escenario de ballet, reflejar su propio personaje vivo y brillante.
El artista encuentra una bailarina en el momento del ensayo. La heroína se congeló frente a la audiencia por un momento en un paso de baile típico: se para en zapatillas de punta, sus manos se apoyan en un tutú de ballet, su cabeza se gira ligeramente hacia un lado, como si se estuviera preparando para la próxima salida en el centro de la sala de ensayos. Otro momento – y la bailarina continuará el baile.
Sus ojos arden, está llena de inspiración y amor por su profesión.
En la imagen, la representatividad tradicional se combina con una nueva visión de la actividad creativa. Bailar en la vida de una bailarina es el significado último de su existencia.
Portrait of the ballerina O. V. Lepeshinskaya by Alexander Gerasimov
Portrait de la ballerine O. V. Lepeshinskaya – Alexander Gerasimov
Retrato de una bailarina E. A. Svekis en un traje de ballet “Marioneta de hadas” – Zinaida Serebryakova
Bailarina Marie-Madeleine Huymar – Jean Honore Fragonard
Bailarina del fotógrafo – Edgar Degas
Retrato de los artistas soviéticos más antiguos I. Pavlov, V. Baksheev, V. Byalynitsky-Birulya y V. Meshkov – Alexander Gerasimov
Regalos de otoño – Alexander Gerasimov
Bailarina Camargo – Nicola Lancre