
Casi la mitad de las pinturas de Durero que nos han llegado son retratos. Entre ellos se encuentran los autorretratos del artista, los retratos de sus familiares y amigos, así como los retratos pintados a pedido. Como regla general, estos son retratos de talle medio con una cabeza ligeramente girada.
El fondo del retrato es neutral en la mayoría de los casos; en algunas de las pinturas está “animado” por una ventana más allá de la cual se abre el paisaje. Esta técnica es prestada por el arte europeo de los pintores holandeses del siglo XV. Reproducimos dos retratos de Durer: “Retrato de un joven veneciano”, 1505 y “Retrato de Jacob Muffel”.
En el último trabajo, en referencia al período tardío del trabajo de Durero, los rasgos faciales se representan mucho más suaves que en sus primeros retratos.
Retrato de un padre a los 70 años – Albrecht Durer
Retrato de Burhart von Riesen – Albrecht Durer
Retrato de Willibald Pirkheimer – Albrecht Dürer
Retrato del padre del artista – Albrecht Dürer
Portrait de Jacob Muffel – Albrecht Durer
Retrato de la madre – Albrecht Durer
Retrato del emperador Maximiliano I – Albrecht Durer
Retrato de Michael Wolgemut – Albrecht Durer