Fedor Grigorievich Orlov, general en jefe, uno de los cinco hermanos que se destacaron en Catalina II. Se crió junto con sus hermanos en el Cuerpo de Cadetes Gentrios, mientras que un hombre joven participó en la Guerra de los Siete Años, mostrando un valor increíble. En 1762, junto con sus hermanos, tomó parte activa en la preparación del golpe.
Después del golpe de 1762, se le concedió el rango de capitán del regimiento de Semenov, y el día de la coronación fue elevado a la oficina del condado y otorgado al chambelán.
Por decreto del 20 de agosto de 1763, Orlov recibió la orden de estar “continuamente en asuntos de actualidad” en el Senado Gobernante y “tener un caso en la mesa del fiscal general”. Pronto, fue nombrado procurador principal del 4to Departamento del Senado, y se le otorgó la Orden de San Alexander Nevsky, manteniendo el rango de capitán de la guardia. En 1767 participó en las actividades de la comisión de elaboración del Código como diputado de la nobleza de la provincia de Oryol.
A sugerencia de Orlov, la comisión de las haciendas se dividió en 3 secciones: la primera fue ocupada por la nobleza, la segunda por “la generación media, o la pequeña burguesía, la tercera por campesinos libres y siervos”. Durante la primera guerra turca, Orlov dejó el servicio civil y en 1770 ingresó en el escuadrón del Capitán Spiridov de la expedición del Primer Archipiélago de la flota rusa. Se distinguió durante la captura de la fortaleza de la Corona, en la batalla naval de Chesme en el barco “San Eustaquio” y en el lago Hydra.
Dirigió parte de la flota, que fue asignada para destruir los asentamientos y fortalezas turcas a lo largo de la costa de Coromanian. Por sus hazañas, fue ascendido a teniente general, recibió una espada, tachonada con diamantes y, el 22 de septiembre de 1770, la Orden de San Jorge de 2da clase. Por el excelente coraje y la valentía que se les brindó durante la victoria obtenida sobre la flota turca en las orillas del Assy, y se los dio a la adquisición de este ejemplo y consejo. En enero de 1772 regresó a San Petersburgo.
El día de la conclusión del mundo Kyuchuk-Kaynardzhiysky, fue ascendido a general en jefe con el despido, según la petición, del servicio. A partir de 1775 vivió en Moscú, se dedicó a la educación de sus hijos ilegítimos, a quienes posteriormente se les asignó la nobleza y el apellido Orlov.