Ferdinand Waldmüller, el mayor representante del líder austriaco, escribió poéticos, paisajes alegres, escenas rurales, retratos. Waldmüller estudió en la Academia de Arte de Viena, fue profesor en 1829-1857 y trabajó en Praga, Brno, Viena, Zagreb.
Los retratos de Waldmüller se caracterizan por la coloración sutil, la forma realista y la atención a los detalles más pequeños. Sus bodegones con jarrones clásicos, que aparecen como un esteta en el autor, y los ramos de lujo son algo fríos, pero crean la impresión de confianza en la fuerza de su belleza. Otras obras famosas: “Autorretrato”. 1828. Galería Austriaca de Pintura, Viena; “Gran protector de paisaje”.
1849. Galería de pintura austriaca, Viena; “Coleccionistas de matorrales en el bosque vienés”. 1855.
Galería Austriaca de Pintura, Viena; “Naturaleza muerta”. 1840. Museo Val-Lraf-Richartz, Colonia.