La pintura “El paisaje en Auvers después de la lluvia”, Van Gogh escribió poco antes de su muerte en la pequeña ciudad de Auvers-sur-Oise.
En la foto el artista capturó la distancia verde con campos arados. Debido a la línea del horizonte alto, los espacios abiertos parecen interminables. Van Gogh pinta un paisaje desde un punto de vista muy alto, y el espectador tiene la impresión de que está flotando sobre el suelo, observando sus hermosos paisajes desde arriba.
Los delicados tonos verdes y azules en el primer plano se convierten en tonos amarillentos, y bajo el cielo azul los campos se ven serenos.
Los techos rojos de las casas se destacan alegremente sobre su fondo. A la izquierda, en la distancia, se pueden ver pequeños árboles cubiertos con un follaje de luz transparente. En el centro de la imagen hay un carro que se destaca en tonos rojo-naranja.
Al parecer, la lluvia acababa de pasar, por lo que se refleja en la superficie húmeda de la carretera.
La imagen está escrita en trazos rápidos y desiguales. La forma ligeramente negligente, característica de Van Gogh, es la más adecuada para este trabajo. Solo mejora la sensación de serenidad con una alegría ingenua e infantil.
A pesar de la tragedia de los últimos meses de la vida de Van Gogh, el paisaje está lleno de vitalidad. Lleno de luz y pureza, respira la atmósfera de un nuevo día de verano.