El segundo título de esta obra, “El castillo encantado”, apareció en 1782, cuando se hizo un grabado de la imagen. Es inusualmente exitoso, ya que corresponde perfectamente a la atmósfera mística de este trabajo.
El biógrafo de Lorren Phillip Balducci, calificó el paisaje presentado como “sin igual en belleza”, y lo considera el pináculo del artista. Interesante es el destino de esta foto. Lorrain lo escribió para su cliente habitual Lorenzo Onofrio Colonna.
Llegó a Inglaterra en la década de 1720, fue comprada de inmediato y permaneció en colecciones privadas durante mucho tiempo. Recién en 1981, adquirió la Galería Nacional. Baldinucci llama a esta pintura “Psique en la orilla”, que conecta directamente su trama con el antiguo mito.
Se representa a Psyche sentada al lado del palacio mágico del dios Cupido, quien, al principio se enamoró de Psyche, luego, por desobediencia, la dejó. Al final, los amantes, después de haber pasado por una serie de dificultades, se reconectaron.