Naturaleza muerta “Rosas rosadas” Van Gogh escribió en 1990 en Auvers-sur-Oise, donde se mudó después del tratamiento en el hospital de Saint-Remy. Entre todas las pinturas de la época tardía del artista, esta naturaleza muerta es una de las mejores.
En la imagen no hay colores de contraste brillantes característicos de períodos anteriores de creatividad. Está hecho en colores pastel suaves, que, a pesar del contraste, no crean nitidez en la combinación de colores. En la naturaleza muerta no hay una composición compositiva clara: parece que puede girarse por cualquier lado y la imagen apenas cambiará.
Las rosas están escritas de tal manera que parecen ser empujadas fuera del plano de la imagen hacia el espacio donde está el espectador.
Sólo un indicio apenas perceptible de un jarrón de vidrio puede indicar dónde está el fondo de la naturaleza muerta. El plano de la mesa se indica mediante una dirección estrictamente vertical de manchas de tonos verdes y ocres. Tal desorden es también muy característico del último período del artista.
También en la imagen se ve claramente la influencia en las obras de Van Gogh de la pintura japonesa, que se expresó en la nitidez de los contornos de las hojas, líneas onduladas ligeramente desiguales de la imagen.