Este pintor veneciano creó grandes lienzos en los que las poses y los gestos de los personajes son complejos y expresivos, y la luz combate la oscuridad. En este caso, Tintoretto recurrió al antiguo mito de cómo Zeus, o Júpiter de los romanos, cautivado por la belleza de Leda, se le apareció en forma de cisne.
La trama fue popular entre los artistas italianos debido a la oportunidad de transmitir la sombra del amor sensual, de representar el hermoso cuerpo desnudo de una mujer y finalmente traer un plástico especial a la imagen. En Tintoretto, el cisne se siente atraído por Leda, quien se parece a este gracioso pájaro.
Según la leyenda, la acción tuvo lugar en el río Evrot, donde Leda se estaba bañando, pero el artista transfirió la escena a la habitación de una rica casa veneciana. La belleza está reclinada en la cama, detrás de ella hay una cortina de terciopelo que resalta la blancura del cuerpo y destaca su suavidad y ternura. A la izquierda hay una doncella que, sin saber qué tipo de cisne, lo va a poner en una jaula.
La acción de la criada, de la que Leda cierra a su amante, refuerza el momento de misterio que está presente en la imagen.