En la pintura de Paul Cézanne “Jug and Fruit”, un mantel blanco fue arrojado casualmente sobre la mesa, con frutas y una jarra sobre él.
La naturaleza muerta se escribe con bastante facilidad y libertad, la combinación de colores es básicamente neutra, el artista utilizó colores cálidos al escribir. Un método especial de aplicación de un frotis le da a la imagen algo de dinamismo. Cezanne está dividida condicionalmente en dos partes: la parte superior se escribe con más frialdad, el calor emana de la parte inferior y se ve una riqueza especial de colores.
En contraste con la fruta caliente y una jarra más fría, la habilidad del artista hace que el lienzo sea lo más realista posible. El artista prestó mucha atención a las sombras y medios tonos. El alto nivel de tecnología del artista le permitió transmitir las transiciones más sutiles de los tonos de pintura.
Ayuda a sentir el volumen y la tridimensionalidad de cada objeto representado en la imagen.