Durero no tuvo un taller grande con muchos estudiantes. Sus auténticos alumnos son desconocidos. Es de suponer que se asocian con él principalmente tres artistas de Nuremberg: los hermanos Hans Thebald y Bartel Beham y Georg Pents, conocidos principalmente como maestros del grabado de pequeño formato.
Es interesante mencionar que en 1525 los tres jóvenes maestros fueron juzgados y expulsados de Nuremberg por opiniones ateas y por expresar ideas revolucionarias. Su alto dominio de los grabados en cobre son de naturaleza completamente secular y dan testimonio de la fuerte influencia del grabado italiano.
Bartel Beham encarna las escenas antiguas, especialmente interesadas en el cuerpo desnudo, crea excelentes retratos, representa figuras de landsknechts. Sus hojas se distinguen por la libertad, la claridad y la ligereza, revelando un gran dominio de la técnica del grabado.
Un ejemplo es la delgada Madonna at the Window, penetrada por la luz y el aire, que es una encantadora escena de género. En las obras de los tres grabadores nombrados, se superan la mezquindad, la fragmentación y la tensión del arte posydegótico; Sus imágenes están dominadas por formas plásticas transparentes, contornos claros y tranquilos. En este sentido, continúan la tradición de obras maduras y tardías de Durero.