En Nyuen Van Gogh prestó gran atención al retrato. En su opinión, los dibujantes eran necesarios para dominar la artesanía artística. Además, planeaba ingresar a la Academia de Artes, donde la imagen de las figuras humanas era la actividad principal.
La vida campesina y la vida de la gente común fue para Van Gogh una fuente inagotable de inspiración. Dibujando retratos de los campesinos, intentó transmitir las características de cada uno de ellos que lo distinguen de los demás y hacen que un rostro simple sea característico e interesante. Le gustaba especialmente representar el tipo de campesinos con frentes bajas, labios gruesos y rasgos faciales gruesos.
Tales personas pueden verse en la mayoría de las obras de Millet, que Van Gogh aprecia mucho.
Este retrato representa a un campesino de Gordin de Groot. Se puede ver en el lienzo “Potato Eaters”, cuyos modelos fueron los miembros de la familia Gordina. Van Gogh la representó con una gorra blanca, destacándose sobre un fondo oscuro.
El rostro de una campesina está escrito de una manera audaz, amplia, sin detalles indebidos. Van Gogh mostró su personaje de forma muy clara y clara, centrándose en la mirada directa y audaz, las cejas ligeramente cambiadas.
Las características de una mujer son ásperas y al mismo tiempo suaves y simples. El esquema de color de la imagen también se distingue por su calidez y suavidad, esto se reflejó en la actitud positiva de Van Gogh hacia la persona representada.