
La trama favorita de Delacroix es una tormenta y un barco solitario en un mar tormentoso. En la barca, Jesucristo con los apóstoles nada hasta la orilla. Comenzó la tormenta, el viento agitó el bote de un lado a otro, las olas verdes hervían, hervían, sin soltar presas.
Alguien remando, tratando de no dejar que el barco vuelque. Uno de los remos escapó de sus manos, trata de alcanzarlo, arriesgándose a caer al agua. Algunos gritan, pidiendo ayuda en la desesperación. Y solo Jesucristo está durmiendo pacíficamente.
Alrededor de su cabeza está el resplandor que ilumina el número de hombres sentados. Jesús duerme, y sueña con un hermoso sueño. Cual Nadie sabe Pero Cristo sabe una cosa: el barco saldrá sin importar qué, y nada les sucederá.
En general, aunque la imagen está llena de movimientos tormentosos, emoción ansiosa, delante de nosotros, entre las nubes sombrías, llega la luz, la luz de la esperanza.
Don Juan Naufragio – Eugene Delacroix
Natchez – Eugene Delacroix
Muerte de Sardanapal – Eugene Delacroix
El novato Dante – Eugene Delacroix
El barco “Emperatriz María” durante una tormenta – Ivan Aivazovsky
Asesinato del arzobispo de Lieja – Eugene Delacroix
Boda judía – Eugene Delacroix
Medea – Eugene Delacroix