Las obras de Gustave Moreau, un artista francés, estaban estrechamente asociadas con el simbolismo. Pero la naturaleza de su obra era diferente. El principio principal del artista fue el principio de “excelente inercia”, cuando los personajes fueron representados en un estado de inmersión y pensamiento en sí mismos. Debido a esto, el espectador debe sentir mejor el estado mental interno de los personajes en la imagen.
El artista creó varios lienzos con la imagen de la Esfinge. Una de estas pinturas es la pintura “Edipo y la Esfinge”, pintada en 1888. El título exacto de la obra “Errante edípico o Igualdad antes de la muerte”.
La imagen se basa en el antiguo mito griego de Edipo, que en su camino a Tebas se encuentra con la Esfinge. Moreau representa a la Esfinge como un monstruo alado, con la cabeza de una hermosa doncella. La Esfinge le pregunta a todos los viajeros un acertijo: “¿Quién camina por la mañana con cuatro patas, por la tarde con dos y por la tarde con tres?”, A lo que nadie puede dar una respuesta verdadera. Y para ello la Esfinge los devoró.
Y Edipo supuso que se trata de las tres edades de una persona: la infancia, la madurez y la vejez.
En esta foto, Edipo no es un héroe valiente. Tanto Sphinx como Edipo anticipan su muerte, antes de lo cual ambos son iguales. La gruta rocosa es el símbolo del útero.
La idea del artista estaba en donde viene la persona, ahí está su muerte. Jocasta, la madre de Edipo, por casualidad, se convirtió en la esposa de Edipo, causó su muerte. Así que esta historia asustó a la generación de Nietzsche de que una mujer que dio la vida puede fácilmente quitarla.
En el centro de la imagen, la esfinge extiende sus alas. Junto a él están las víctimas derrotadas que no respondieron a su pregunta. Sus caras no están dibujadas en detalle. Edipo, ubicado en el lado izquierdo de la imagen, con un andar cansado, apoyado en un bastón, entra en la gruta.
Su cabeza está bajada de la impotencia, él sabe que su vida pronto terminará. Mirando la foto, puedes ver el cielo oscureciéndose en el crepúsculo vespertino. Ya comenzó la noche cazando murciélagos. Sphinx mira al viajero que llegó, orgulloso sentado en su cama.
Sus alas son hermosas y blancas como la nieve.
El artista destaca a los personajes principales con tonos claros, ocres y amarillos sobre un fondo oscuro y frío. El formato vertical de la imagen enfatiza la grandeza de la Esfinge. La obra es trágica y misteriosa.
La imagen te hace pensar en la vida y la muerte.