Esta foto de Franz Marc está llena de paz. El artista representó a dos mujeres que se sentaron a descansar en la hierba y charlando entre ellas.
Se pueden hacer muchas suposiciones sobre quiénes son estas mujeres. Quizás son dos amigas que salieron a caminar y decidieron descansar. O tal vez esta madre e hija están discutiendo algunos asuntos familiares o secretos.
La pintura tiene lugar en la ladera de la montaña, en algún lugar del fondo debería haber un terreno montañoso, pero el artista la dejó entre bastidores para llenar el lienzo con tranquilidad. Es notable que el artista no prestó específicamente mucha atención a los detalles. Los rostros de las mujeres no se pueden desmontar: uno, escondiéndose del sol, tapándose con una mano, el otro, hablando de algo, convertido en perfil para el público.
El efecto de barrido es inherente a los otros elementos de la imagen: no hay claridad en las líneas, solo suavidad.
Sobre la hierba verde destaca una mancha azul brillante de una de las mujeres. Pero la hierba verde se convirtió en el principal centro de color del lienzo. El delicado color amarillo de la gorra y las flores de las mujeres está aún más delineado por el verde de la hierba.
Una combinación tan hábil de colores cálidos da a la imagen una serenidad excepcional.