Vasily Perov era un ávido cazador, por lo que el tema de la caza en sus obras es muy común. Tales lienzos con nombres que hablan como “Fisherman”, “Golubyatnik”, “Bird-eaters”, “Hunters in Halt” se convirtieron en la marca registrada del artista.
La trama de la imagen tiene sus orígenes en la vida real, en los tiempos del artista la caza fue muy popular: tres hombres se detuvieron para descansar después de una caza muy exitosa. Para juzgar su éxito, podemos mirar la esquina inferior izquierda del lienzo, donde veremos un par de patos y una liebre. El cielo pesado, de plomo, amarillo, hierba seca y abrigos cálidos en los cazadores nos muestran que a fines del otoño está en el patio.
El artista con una luz brillante se centra en las caras y manos de los personajes del lienzo. Un hombre anciano, aparentemente un cazador experimentado, está contando vívida y apasionadamente algo a sus amigos. Por su expresión facial y su postura corporal, uno puede juzgar que su historia es más probable sobre una curiosidad o un caso de caza.
El joven cazador, por el contrario, escucha al “mentor” muy atenta y seriamente. Pero un hombre de mediana edad, que se encuentra a la izquierda del narrador, claramente no oculta su desconfianza en los discursos de su amigo, e irónicamente.
Detrás de la trama habitual de la pintura, aparentemente cotidiana, Vasily Perov esconde el simbolismo y el significado profundo. En el lienzo, se enfrenta a las tres etapas de la vida de cada persona. El símbolo de la vejez se representa en un cazador anciano que vive en el pasado con recuerdos.
La juventud está en un joven ingenuo que toma todo en serio, y la madurez es un hombre de mediana edad que confía solo en su experiencia y fortaleza.
Un hecho interesante es que cada personaje de la pintura de Perov “Halt hunters” tiene un prototipo real, también grandes amantes de la caza, amigos del artista: D. P. Kuvshinnikov, V. V. Bessonov y N. M. Nagornov.