Una vez más, la naturaleza muerta está escrita en el espíritu del Signo neoimpresionista. Sobre la mesa, cubierta con un mantel multicolor, se colocaron varios platos, se arrojó una toalla de manera casual.
Toda la imagen está escrita en pequeños trazos, pero alegre. El ambiente festivo crea una combinación armoniosa de rojo, amarillo. Tonos verdes, azules y morados.