Teoría e investigación no confirmadas de que Rembrand pintó sus retratos utilizando proyecciones de espejo.
Algunos artistas del siglo XVII utilizaron un sistema de espejos cóncavos y planos para lograr autorretratos más realistas. Quizás pintores tan famosos como Rembrandt y van Rijn recurrieron a esta técnica. Vale la pena señalar que todas las herramientas necesarias estaban disponibles para los maestros de la época.
Para crear la proyección del artista se necesitaba luz natural, así como un espejo cóncavo y plano. Los espejos cóncavos, por cierto, se conocen desde la antigüedad. Hay una leyenda de que Arquímedes quemó la flota romana con ellos, algunos dibujos de Leonardo da Vinci contenían un diagrama del funcionamiento de una máquina para pulir espejos con una curvatura dada, el telescopio Galileo Galilei tenía un ocular cóncavo.
Los trabajos de los maestros de la época, incluidos los estudiantes de Rembrandt, contenían pruebas exhaustivas del trabajo con equipos ópticos.
Los primeros autorretratos de Rembrandt alcanzaron el nivel de detalle que se logra incluso en imágenes pequeñas. Varias de estas obras fueron grabadas en cobre. Las imágenes grabadas tenían una pequeña escala, lo que estaba ocurriendo, según los investigadores, porque cuando se usa una proyección, un aumento en el retrato reflejado lleva a bordes borrosos, lo que dificulta el trabajo con una pluma afilada.