Mirando el autorretrato más famoso de Pissarro, creado en 1873, queda claro por qué la gente, en tono de broma, llamaba al artista los nombres bíblicos “Moisés” o “Abraham”.Parece que el profeta de la edad respetable del Antiguo Testamento está mirando al espectador desde el lienzo, mientras que el pintor cumplió 43 años en ese momento.
En el activo Pissarro muchos autorretratos, y cuando se crearon, usó óleo, lápices y gouache, pero entre las series de pinturas de este género, “Autorretrato”, de fecha 1873, el trabajo es en gran parte simbólico, porque aquí están los elementos de su nuevo estilo El lienzo fue escrito un año antes de la primera exposición impresionista. Los paisajes del segundo plan tienen una representación esquemática, pero en su estilo es notable que cumplen una serie de criterios impresionistas. En muchos sentidos, la cara de retrato del autor está escrita en su tradición de paisaje habitual: un juego similar de color y luz, nada más que una designación simbólica de profundidad, espontaneidad.
En la técnica de realizar el trabajo, la influencia de Cézanne es claramente notable, y la pose clásica del “modelo” corresponde a las tradiciones de pintura que caracterizan la obra de Chardin. Como lo señalaron los contemporáneos Pissarro y Cézanne, la comunicación constante de dos maestros trajo muchos beneficios para la pintura francesa, y los artistas a menudo se representaban en sus pinturas.