Aime Jules Dahl, su esposa y su hija El retrato de la familia Dahl fue pintado por el pintor británico Alma-Tadema Lawrence en 1876 durante el período de prosperidad de la era victoriana, cuando el trabajo arduo, el ahorro, la puntualidad y la sobriedad fueron los cimientos de la moral de la sociedad. Estos postulados influyeron, entre otras cosas, en el desarrollo del arte y la pintura, en particular. El retrato familiar presentado de Dalu es un ejemplo vívido, modesto, francamente realista, mezquino y exagerado.
La obra está dedicada al escultor EJ Dahl, no menos famoso de la época, cuya mano incluye las obras de Eugene Delacroix, el triunfo de Sileno conservado hasta nuestros días, en el Jardín de Luxemburgo, la lápida de V. Noir en el cementerio de Pere Lachaise. Cabe señalar que el propio artista no se consideraba un pintor de retratos, prefiriendo temas históricos. En cuanto a la escritura de retratos, solo personas cercanas y amigos recibieron su atención.
La familia de Dalu, al parecer, era amiga del autor. Su retrato resultó sencillo y como una carta rápida de la naturaleza, por casualidad.
Trabajo muy ligero, ¿no es así? La hija del escultor es joven y encalada a la pureza. Ella es como un punto brillante en la vida de su padre, con una mirada franca, aún sin astucia ni mentiras. El contraste de la infancia del niño se ve subrayado por la fatiga de la madre y por los ojos ya diferentes, llenos de angustia, sabiduría de la vida, profundidad. El mismo Jules, como una imagen pegada, aclamado por el pintor para dar la vuelta.
Apenas cabía en el lienzo. Su imagen se borra ligeramente debido a la paleta silenciada del plan distante. Sin embargo, la mirada penetrante de los ojos negros anima la cara.
En los dedos talentosos de Dahl se apaga el cigarrillo. Todo habla de la transitoriedad de crear trabajo sin una declaración especial. A pesar de la afirmación de Alma-Tadem sobre la no participación en la pintura de retratos, la imagen de la pareja Dahl refuta esta idea.
El retrato está escrito de manera muy profesional, con un interesante diseño en negrita de los personajes, en una técnica diferente, pero inherente a esa época, y con una composición diferente.